(continua) Evaluación de Tecnologías para la Salud

Los Retos

El Programa de Evaluación de Tecnologías, pretende hacer frente a los retos identificados en el Plan Nacional de Desarrollo  2007-2012 y que pueden agruparse dentro de dos grandes rubros. El primero es consolidar la producción de ETES, de manera que se establezca la credibilidad científica de los productores y se estandaricen los métodos de evaluación logrando que los usuarios de las evaluaciones las empleen de manera regular al incorporar o retirar tecnologías de los servicios de salud. El segundo es fomentar el uso de la ETES como un mecanismo de apoyo para el establecimiento de prioridades de las intervenciones que serán incorporadas a la “cartera de servicios” que se otorga a la población.

Por otra parte, el Programa Sectorial de Salud 2007-2012 establece en la línea de acción 4.5 “Promover la evaluación de tecnologías para la salud”, con lo que busca garantizar que las tecnologías para la salud respondan a las necesidades de la población, evitar el uso inseguro y el dispendio de los recursos mediante la evaluación de tecnologías que se propone incorporar a los servicios de salud, para ello, se desarrollará un proceso de evaluación de tecnologías y se buscará promover activamente los beneficios de la utilización de los resultados de evaluación.

cuadro 2

Las Estrategias

Evaluar tecnologías sanitarias considerando los aspectos clínicos, económicos, éticos, sociales y organizacionales

La evaluación de tecnologías sanitarias, tanto nuevas como establecidas, ofrece información útil para decidir sobre su introducción, utilización adecuada o retiro, en términos de seguridad, efectividad, eficiencia, equidad, y accesibilidad, facilitando los instrumentos necesarios para los responsables de la toma de decisiones.

La ETES será el puente entre los distintos niveles de decisión y la generación de conocimiento. Además procurará satisfacer las necesidades de información de los responsables de tomar decisiones —desde los que toman medidas clínicas frente al paciente, hasta los que establecen la política rectora que afecta a todo el sistema— mediante las conclusiones y recomendaciones emitidas sobre el impacto de los aspectos clínicos, económicos, éticos, sociales y organizacionales de las tecnologías sanitarias evaluadas, de manera que se disminuyan los efectos negativos y se contribuya a mejorar la calidad del estado de salud individual y colectiva.

 

>>>siguiente